Auditoría
La auditoría se sigue viendo como una obligación legal a las que las empresas se «someten» como un requisito más, pero que aporta poco o nada a la empresa auditada.
Propongo dejar atrás el concepto de coste administrativo y comenzar a ver la auditoria como una ayuda al proceso de mejora permanente de toda entidad.
Proceso de auditoría
Verificación del cumplimiento de los requisitos legales-administrativos
Revisión de la estructura del control interno de la entidad
Benchmarking y análisis financiero
Revisión de todos los riesgos de la compañía y verificación de que han sido cubiertos
Confirmación de que las cuentas presentadas representan la imagen de la compañía.
La normativa española exige la emisión de la carta de recomendaciones y el análisis del control interno. Esta carta puede ser un simple proceso administrativo o convertirse en una de las armas fundamentales para la mejora de la operativa de la compañía, cuanto más interés y personalización tenga la carta más útil será para el cliente
La auditoría es un requisito legal, pero también un servicio con un enorme valor añadido si sabe utilizarse. Un experto independiente realiza un estudio individualizado de la compañía, estudiando sus procesos y revisando que se estén realizando de la forma descrita por la gerencia de la compañía. Al ser un » externo» no tiene el sesgo propio de estar inmerso en el día a día de la entidad y la laxitud que a ello acompaña.
El trato directo y personalizado hace que la auditoria sea un elemento clave y diferencial por el cual todas las empresas, independientemente del tamaño o requisitos legales, quieran tener dicho servicio.
En este blog, pretendemos dar una visión de la auditoría desde un punto de vista diferente, en donde el trabajo de auditoría sea algo más que cumplir con la legislación vigente.